Historia del Templo del Placer: 3
Los dos se veían y se miraban. Se miraban y se sonreían. Se perdían en la fiesta y rápidamente se buscaban. Desde que cruzaron las miradas los dos pensaban en cómo quitarse las ganas.
Y es que siempre encontramos personas que se convierten en tentaciones que no podemos evitar.
Podemos resistir todo en la vida excepto la tentación; y la mejor manera de librarse es caer en ella…
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